Junto con Madrid, Zaragoza y Valencia Bodega Pirineos acaba de presentar en Barcelona su innovador proyecto CDTI para el que se han invertido 1,4 millones de euros y en el que ha sido protagonista la colaboración con de los departamentos de Hortofruticultura y Botánica, Técnicas de Irrigación, Medio Ambiente y Suelos de la Universidad de Lérida; la empresa Vyvelys (Consultores Francia) y Master Of Wine de Reino Unido.
Hasta el Hotel Claris *****GL se acercaron más de 60 profesionales del mundo del vino, entre hosteleros, periodistas especializados y sumilleres que valoraron muy positivamente el trabajo realizado por todos los departamentos de la bodega altoaragonesa para llevar a cabo este proyecto cuyo objetivo es acercar al consumidor conceptos innovadores para una nueva visión del vino empleando la fruta como elemento de construcción del vino y la apetecibilidad.
Para la realización de dicho proyecto, se ha elaborado un duro trabajo de acondicionamiento de nuestras variedades de uva y una adaptación a las técnicas de elaboración. Todo ello junto con estudios de la percepción de los consumidores y exhaustivos análisis de maduración han dado como resultado varias conclusiones centradas en dos nuevos conceptos procedentes de dos importantes momentos de maduración de la uva, el Total Fruit y el Swallow Factor.
TOTAL FRUIT
El concepto de fruta hace referencia no solamente a la percepción olfativa de la misma en los vinos sino que se trata de un elemento de construcción del vino, capaz de darle volumen, estructura y longitud en boca. En esta forma de entender el vino, la fruta no es un atributo más sino que ésta se convierte en el centro alrededor del cual gravitan el resto de las características y la calidad del mismo. No se trata de hablar de un vino afrutado sino de “la fruta” del vino.
SWALLOW FACTOR / APETECIBILIDAD
Hace referencia a las ganas de beber un vino cuando lo saboreamos en la boca, es decir, a su apetecibilidad. Este concepto está asociado a la carencia de elementos que nos causen rechazo y a la presencia de sensaciones que nos comuniquen aceptación. Ausencia de amargos, de tanicidad, de acidez y dominio de la fruta, y sensaciones dulces.
Para comunicar mejor estas conclusiones con el consumidor final, se ha desarrollado una nueva imagen para nuestras marcas capaz de describir la percepción sensorial del vino que prescinde de los parámetros habituales químicamente observables.